La Autoridad Nacional de Aduanas en conjunto con los estamentos de seguridad que componen el Programa Global de Control de Contendores (PGCC), lograron la incautación de un cargamento de 99 paquetes rectangulares de presunta cocaína en el puerto de Balboa.
El cargamento, que viajaba dentro de un contenedor que según la declaración de tránsito debía contener asientos de baño, estufas y sillas plásticas, llevaba como ruta de destino el puerto de Quetzal en Guatemala, pero la efectiva acción de los especialistas aduaneros, logró segregar el contenedor y aplicarle tecnología no intrusiva, descubriendo que en el interior habían unos maletines que no formaban parte de la carga declarada, por lo que se llama a las autoridades que conforman el PGCC para una revisión física que terminó con el hallazgo de la presunta droga en cuestión.
La droga fue retirada del recinto portuario por la Policía Nacional en presencia de autoridades competentes para iniciar las investigaciones que deslinden las responsabilidades del caso.